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Clausura definitiva del último vaso del vertedero de es Cap de Barbaria

abocador_webDesde el área de Medio Ambiente del Consell Insular de Formentera se ha destinado un total de 420.000 mil euros para proceder a las obras de clausura definitiva del último vaso de vertido de es Cap de Barbaria que estuvo activo hasta el 2006, momento en que entró en funcionamiento la actual planta de transferencia.

Estas obras concluyeron en el mes de mayo y han consistido en la clausura de la sección de los residuos sólidos y urbanos, mediante el sellado con materiales aislantes de primera calidad, 2 capas de geodren y 1 capa de geotextil, alternadas con capas de tierra y áridos procedentes de los excedentes de residuos de construcción y demolición del propio vertedero.

Las obras se han realizado siguiendo un estricto control de calidad y la máxima prioridad ha sido la de garantizar la estanqueidad de la masa de residuos, para mantenerla estable y no sufrir modificaciones que pudieran tener incidencias importantes sobre el medio ambiente. A este respecto, el vertedero cuenta con 7 pozos de desgasificación y una balsa de lixiviados para recoger los líquidos que se generen por la acción de descomposición de los residuos.

Cabe destacar que, atendiendo a la normativa específica de aplicación y explotación y clausura de vertederos, RD 1481/2001, de 27 de diciembre, se determina que la entidad explotadora del vertedero, una vez clausurado, debe hacer un seguimiento durante un período mínimo de 30 años. A tal efecto, desde el área de Medio Ambiente de Formentera se ha presentado el proyecto de postclausura al servicio de residuos del Govern Balear, que es el organismo encargado de velar por el cumplimiento de la normativa tal y como establece el RD.

Las variables más importantes a tener en cuenta en la fase posterior de clausura del vertedero son los datos meteorológicos, el control de aguas superficiales, el control de lixiviados y de aguas subterráneas, así como la emisión de gases. Todo ello a efectos de impedir cualquier tipo de contaminación del suelo o atmosférica.

En cuanto a la recuperación e integración paisajística del vertedero, se ha llevado a cabo una reforestación de la cubierta superior con vegetación autóctona con pinos, sabinas y matas, recuperando este espacio. Hay que remarcar, que una parte de la finca del vertedero de Cap de Barbaria, se sigue utilizando para determinadas fracciones de residuos (acopios temporales) como restos de poda, voluminosos y chatarra.

Estas acciones no se realizan de forma aislada, sino que se están impulsando otras acciones que mejoren de forma integral la gestión de este espacio. La más destacada es el proyecto de acondicionamiento del perímetro y de los accesos, actualmente en periodo de información pública hasta el día 17 de agosto, que facilitará el acceso a las diferentes instalaciones de la finca y permitirá una mejor organización de la circulación de los vehículos dentro del perímetro.

El proyecto está valorado en 73.478,40 euros y contempla la reposición del vallado perimetral del recinto, la ampliación del vial interior (dentro del recinto del vertedero) con su asfaltado, la creación de una barrera vegetal para minimizar el impacto visual, el cambio de ubicación del punto de control de acceso al recinto del vertedero, la instalación de una barrera manual de un interfono para ponerse en contacto con el vigilante en caso de que tenga que salir de la caseta de control y la construcción de una serie de celdas que permitirán depositar de forma termporal todos aquellos residuos voluminosos que en un futuro se depositarán en la recogida que se prevé construir próximamente en el polígono industrial.
 
Estas acciones han supuesto la tramitación de diferentes autorizaciones ante la Consejería de Medio Ambiente del Govern Balear, ya que la parcela limita con zonas protegidas al amparo de la directiva Europea de Hábitats, Red Natura 2000.

Finalmente, con este conjunto de acciones, se podrá dar por terminada una de las asignaturas pendientes en cuanto a la adecuada gestión de residuos en la isla de Formentera, que se verá complementada en la apertura y la puesta en marcha del centro CAT que está prevista para finales de este verano.