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La Conselleria de Bienestar Social presenta la nueva técnica del área de dependencia

Desde la entrada en vigor de la ley de Promoción y Autonomía, ya se han tramitado 110 expedientes de personas dependientes
La consellera de Bienestar Social y Juventud del Consell de Formentera, Margalida Font, ha presentado esta mañana la nueva técnica encargada del área de dependencia, que ha sido contratada gracias a un convenio con la Fundación de Atención y Apoyo a la dependencia y Promoción de la Autonomía Personal.
La creación de esta plaza ha sido una demanda por parte de la ciudadanía, que permitirá agilizar los aspectos burocráticos y dar una respuesta más cercana e integral a los usuarios. La técnica de dependencia será la encargada de tramitar toda la documentación en esta materia, realizará las valoraciones oportunas sobre las solicitudes, y elaborará el Plan Individualizado de Atención (PIA) para ofrecer el mejor servicio adaptado a cada usuario.
La interconexión con la base de datos del Govern Balear, permitirá hacer un seguimiento detallado de los expedientes y de su resolución, por lo que se dará una atención mucho más personalizada.
Desde la entrada en vigor de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia el día 1 de enero de 2007, la conselleria de Bienestar Social de Formentera ha tramitado 110 expedientes. Cabe destacar que hasta día de hoy no se disponen de instalaciones para atender a las personas dependientes, lo que quedará solucionado con la próxima inauguración del centro de día a finales de año.
Esta ley financia los servicios a las personas dependientes, que requieren de prestaciones sociales por encontrarse con una discapacidad moderada o severa, psíquica o física, personas mayores o niños, entre otras situaciones de dependencia.
Los grados establecidos por la presente ley son:
Grado I: dependencia moderada: cuando la persona requiere ayuda para realizar actividades cotidianas, al menos una vez al día, o tiene necesidades de apoyo intermitente y limitado para su autonomía personal.
Grado II: dependencia severa: cuando la persona necesita ayuda para realizar las actividades cotidianas de la vida diaria, dos o tres veces al día, pero no quiere la ayuda permanente de una persona o tiene necesidades de apoyo extensas para su autonomía personal.
Grado III: gran dependencia: cuando la persona necesita ayuda para realizar sus actividades cotidianas muchas veces al día, y que, por su pérdida de autonomía física, mental, intelectual o sensorial, necesita de la ayuda indispensable y contínua de otra persona o tiene necesidades de apoyo generalizadas para su autonomía personal.
La contratación de la nueva técnica, con una experiencia de más de dos años a la Fundación de Atención y Apoyo a la dependencia, tiene un coste de 36 mil euros anuales y aplicará los fundamentos básicos de la ley, que dan prioridad a la teleasistencia, la ayuda domiciliaria y los centros de día.